La histeroscopia es una técnica que nos permite valorar la cavidad endometrial (la cavidad del útero) con visión directa mediante la introducción de una pequeña cámara por el orificio cervical. En otra entrada podemos hablar de ello. Hoy os queríamos hablar de un hallazgo que cada vez vemos más, especialmente en pacientes con dificultades en la búsqueda del embarazo. Se trata del T-shaped Uterus o, en español, ÚTERO EN T.

El útero en T es una malformación uterina (presente desde el mismo desarrollo embrionario) en la que la cavidad uterina tiene una morfología diferente, en forma de T, Y o I (estos son los principales subtipos de T-shaped uterus).
El diagnóstico idóneo de este tipo de alteraciones consiste en la combinación de histeroscopia (que permite ver la cavidad por dentro y sospechar esta alteración) y ecografía ginecológica en 3D, que permite reconstruir la morfología uterina y apreciar mejor las características del útero.
El útero en T se asocia a infertilidad y a mayores tasas de aborto, por lo que su identificación y tratamiento son cruciales. El tratamiento se realiza también por histeroscopia, aumentando la cavidad endometrial mediante un asa de diatermia.
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